Todo sobre Sigüenza - qué ver, hacer, visitar, comer, cómo llegar
Antes de conocer uno a uno los principales sitios de interés, aquí tienes un vídeo con todo cuanto hay que ver en Sigüenza.
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Situada al lado de la Plaza Mayor, la Catedral de Santa María la Mayor comparte diócesis con la localidad de Guadalajara.
En el momento en que el primer obispo de Sigüenza, Don Bernardo de Agén, conquistó la ciudad en el siglo XII, restauró el obispado y hizo importantes obras constructivas.
Comenzando por la catedral, a la que además de esto se le dio un empleo defensivo, de ahí viene el sobrenombre de Fortis Seguntina.
Inicialmente era románica, pero en el siglo XIV se cambió al gótico, el interior no se dio por terminado hasta el siglo XVIII.
Tras la Guerra Civil se llevó a cabo una profunda rehabilitación, cambiando ciertos aspectos arquitectónicos.
En el exterior resaltan la torres protectoras que flanquean la testera principal, sobrepasan los 40 metros de altura.
En frente de la Plaza Mayor está la Puerta del Mercado de estilo románico, tal como la Torre del Gallo que comenzó siendo una atalaya.
Del interior destaca la Capilla del Doncel, con los sepulcros de Fernando de Arce y Catalina de Sosa, progenitores del Doncel.
Tal como el sepulcro de su hermano Fernando Vázquez de Arce y el propio mausoleo de Martín Vázquez de Arce, Doncel de Sigüenza.
Estas son otras estancias destacadas:
- Sacristía de las Cabezas, en su bóveda están cinceladas las cabezas de más 300 personajes históricos de Sigüenza.
- Coro, adornado con celosías góticas.
- Trascoro, con la imagen de la patrona coronando un altar barroco.
- Retablo de Santa Librada, sus reliquias se preservan bajo un retablo plateresco.
El horario de la Catedral de Sigüenza es: de lunes a domingo de 09:00 a 13:30 y de 16:30 a 19:30 horas.
La entrada es gratuita.
Las visitas guiadas cuestan 4€, con un mínimo de seis personas por grupo.
Castillo de Sigüenza
En sus orígenes era el Castillo Episcopal, actualmente alberga el Parador Nacional de Turismo.
Desde la temporada romana era un castro defensivo, con los visigodos un castillo y con los árabes una alcazaba.
Con la llegada de los cristianos se edificó un castillo fortaleza, como residencia a los obispos de Sigüenza.
Los religiosos permanecieron hasta el siglo XIX, en el momento en que fueron expulsados por la Desamortización de Mendizábal.
Tras el abandono y posterior deterioro a lo largo de la Guerra Civil, se reconstruyó siguiendo los planos originales.
El conjunto está articulado cerca de un Patio de Armas, con un pozo y una fuente decorando el pequeño jardín.
Entre las estancias mucho más destacadas es el Salón del Trono, también conocido como el Salón Colorado o Salón de Doña Blanca.
También es de interés la Capilla del Castillo, preservada íntegra con su diseño y decoración del siglo XIII.
De Doña Blanca de Borbón es la principal historia de historia legendaria del Castillo de Sigüenza, tan solo dos días tras su enlace con Pedro de Castilla, el rey ordenó encerrarla durante cuatro años en la fortaleza.
Diríase que su espíritu continúa deambulando entre las frías paredes de piedra, el día de hoy su crónica se representa a lo largo de las Jornadas Medievales.
Casa del Doncel
Construida entre los siglos XV y XVI, es uno de las edificaciones civiles más emblemáticos de Sigüenza.
En principio era vivienda de la familia Vázquez de Arce, aunque con el paso del tiempo fue cambiando de propietarios.
Es un casa-torre formada por tres cuerpos y coronada por almenas.
En la planta baja está la entrada primordial, compuesta por un enorme arco y decorada con los escudos de las familias residentes.
El segundo cuerpo tiene dos ventanas, una pequeña en un lateral y una mayor en el centro, encima de ella está el blasón de los Vázquez de Arce.
Considerablemente más destacable es el interior, rehabilitado por la Facultad de Alcalá de Henares.
La planta inferior cuenta con la decoración mudéjar original, en la superior está el Archivo Histórico Municipal.
Plazas
Frente a la Catedral está la Plaza Mayor, acogiendo el Municipio, las Viviendas del Cabildo y la Puerta del Toril.
Por su parte en el corazón de la judería está la Plazuela de la Cárcel, a lo largo de la Edad Media era la Plaza Mayor.
Alrededor de las plazas se concentra la mayoría de hospedajes de Sigüenza, revela toda la oferta disponible en Booking.
Iglesias
Además de la Catedral de Santa María destaca la Iglesia de San Vicente, donde se almacena la imagen del santurrón patrono.
Otra joya del románico es la Iglesia de Santiago, su portada tiene un medallón con el busto de Santiago Apóstol.
Museo Diocesano de Arte Viejo
Está ubicado frente a la Catedral de Santa María, en un palacete neoclásico correspondiente a la Casa de los Barrena.
Alberga una extensa colección de arte de sacro de una de la diócesis más viejas de España.
El museo se inauguró en 1968, recientemente fue restaurado para adecuarlo a los tiempos modernos.
La obra más esencial es la “Inmaculada Concepción Niña” de Zurbarán.
Aparte de pinturas hay esculturas, retablos, orfebrería o tapices, de artistas como Salzillo, Francisco Madrazo, Pedro de Andrade o Vicente Carducho.
En conjunto mucho más de 200 piezas que engloban desde el siglo XII al XX.
El horario del Museo Diocesano de Arte Antiguo es:
- Miércoles, jueves y domingos: de 11:00 a 14:00 y de 16:00 a 19:00 horas.
- Viernes y sábados: de 11:00 a 14:00 y de 16:00 a 20:00 horas.
Cierra los lunes, martes y desde el 10 de enero al 10 de marzo.
La entrada general cuesta 3€ y la reducida 2€.
El tercer miércoles de cada mes el ingreso es gratuito.
Palacio Episcopal
Tuvo múltiples usos, de entrada fue sede la Universidad Menor o Facultad de San Antonio de Portacoeli.
Hasta 1836, en el momento en que desaparecieron múltiples de las universidades menores de España.
El edificio se edificó a comienzos de siglo XVII, mezclando elementos barrocos y neoclásicos.
Hoy en día alberga la sede de la Diócesis de Sigüenza-Guadalajara, Seminario Mayor y Fichero Diocesano.
Historia de Sigüenza
Los orígenes se remontan a la Edad de Hierro, si bien fueron los celtíberos quienes le pusieron el nombre de Segontia.
Su desarrollo llegó con la ocupación romana, gracias a su situación a mitad de camino entre Toledo y Zaragoza.
Los visigodos hicieron un esencial centro del catolicismo, distribuyendo sede episcopal con la Diócesis de Toledo.
El día de hoy sostiene esa notoriedad, pero compartiendo sede episcopal con la Diócesis de Guadalajara.
Además los visigodos se trasladaron a la orilla contraria del Henares, con mejor situación estratégica.
Los árabes llegaron a inicios del siglo VIII asolando con todo, por lo que perdió su antiguo esplendor.
A principios del siglo XII, con la reconquista cristiana liderada por Don Bernardo de Agén, empezó la restauración.
A esta relevancia ayudó el Cardenal Mendoza, nombrado obispo de Sigüenza en la época del siglo XV.
Su angosta relación con los Reyes Católicos y su puesto de consejero de Castilla, impulsaron las proyectos de transformación.
De esa temporada es el Doncel Martín Vázquez de Arce, su casa y sepulcro gótico son dos de los sitios mucho más visitados de Sigüenza.
Con la llegada de la Revolución Industrial y el ferrocarril en el siglo XIX, se transformó en epicentro industrial.
Cuando estalló la Guerra Civil fue entre las primeras ciudades tomadas por los rebeldes, no sin antes ocasionar grandes estropicios.
Durante el franquismo fue un esencial centro educacional, gracias a la conversión de los conventos en institutos.
Con la construcción del Parador Nacional en el Castillo de Sigüenza, empezó la floreciente industria turística.
Fiestas de Sigüenza
El 22 de enero son las Fiestas de San Vicente, en honor del patrón de Sigüenza.
La noche previo hay una gran hoguera frente a la Iglesia de San Vicente, el 22 es la misa y procesión del santo.
Al ser una ciudad con gran tradición religiosa, la Semana Santa se vive con un especial fervor.
Son múltiples las procesiones que recorren en respetuoso silencio las calles medievales.
Por las Fiestas de San Juan, cerca del 24 de junio, la localidad se llena de arcos de flores conformados por los pequeños.
El segundo fin de semana de julio son las Jornadas Medievales, ideal para revivir el esplendor medieval.
En la época de agosto son las Fiestas de la Virgen de la Mayor, con una procesión nocturna.
La Navidad incluye la Rondalla Seguntina, agrupación que recorre las calles entonando villancicos y canciones populares.
Comer en Sigüenza
La cocina es tradicional castellana, contando con los productos de mejor calidad de la zona.
Entre los entrantes resaltan las migas seguntinas o la sopa castellana, así como las setas en temporada.
Como plato primordial nada superior que asado de cordero, cabrito o cochinillo o una gran variedad de carnes a la brasa.
Durante la época de caza se incluyen preparaciones con ciervo, jabalí, conejo o perdiz.
Para acompañar estas exquisiteces lo ideal es un vino con Denominación de Origen de La Mancha.
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Entre los postres resaltan las yemas del Doncel, así como otros dulces conventuales elaborados con la miel que se genera en la zona.
Las monjas de clausura del Monasterio de Nuestra Señora de Los Huertos siguen preparando los dulces de manera tradicional.
Es el caso de los bizcochos borachos, yemas, pastas, nochebuenos, flores y considerablemente más.
Productos habituales
Varias tiendas y talleres se ocupan de la venta de modelos tradicionales, destacando la cerámica, forja, alfombras, muebles, espéculos, botas de vino o artesanía.
Una buena ocasión para conocer la artesanía tradicional es conocer el Mercadillo de los Sábados, ubicado en el Recorrido de los Arcos.
Otra alternativa es conseguir artículos alimenticios, como dulces conventuales o miel con Denominación de Origen Cuidada.
En septiembre del 2014 Sigüenza se convirtió en la Capital de la Miel y la Sal, en las Jornadas De europa de Patrimonio.
De qué forma llegar a Sigüenza
El tren es el medio de transporte público más usado, estando conectada con Madrid, Guadalajara, Zaragoza o Barcelona.
Hay un tren regional que hace el recorrido desde La capital de españa en cerca de una hora y media, el precio del billete empieza en 11,85€.
Puedes conseguir más información y reservar tus billetes en la web de Renfe.
Más pintoresco es el Tren Medieval, gozando de una actuación de trovadores y malabaristas y una degustación de yemas seguntinas.
Funciona todos los sábados, de abril a junio y de septiembre a noviembre. Cuesta 35€ para los mayores y 16€ para los pequeños.
Asimismo se puede optar por el autobús, desde la Estación Sur de Madrid son cerca de dos horas de viaje.
El billete sencillo cuesta 12,48€, reservando ida y vuelta sale por 19,95€. Mucho más información y reservas en la web de Samar.
Para finalizar está la opción alternativa de viajar en transporte particular, gracias a su conexión con la autopista A-2 mediante múltiples rutas.
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Estacionar en el caso histórico es bastante difícil, en tanto que muchas de las calles son peatonales.
La opción mejor es llegar de manera directa hasta el Castillo-Parador de Sigüenza, con un amplio estacionamiento gratuito en la entrada.
